Vade Retro

© 1979: Manuel Corleto

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Vade Retro
Manuel Corleto

Travesura televisiva en tres tiempos y fracción

PERSONAJES:
   NOTICIADOR
   FLEDER
   MADRE
   DAMUS
ayudante - modelo - papá - detective - renacuajo - mery - policías - médico - practicante - monja - autoridad civil - autoridad militar - cura - amigos - enemigos - tres perros - catorce gatos - dos periquitas australianas - loro - noticiadora - escriba - testigos - curiosos

UN SET DE TELEVISIÓN POR TODO DECORADO, Y TRANSPARENCIAS PARA AMBIENTAR LAS DIFERENTES ESCENAS

Estudio de televisión. Noticiero. NOTICIADOR sentado frente a las cámaras.

NOTICIADOR
Última hora. El cadáver del enemigo público número uno fue encontrado parcialmente devorado por sus mascotas —catorce gatos y tres perros sin pedigree—. Se presume que el enemigo público número uno resbaló mientras trataba de evitar una disputa entre gatos y perros y se fracturó la base del cráneo al caer. Los vecinos dicen haber oído el escándalo el jueves por la noche y que, después de eso, no se escuchó nada más. Hoy en la mañana, los vecinos extrañados por el silencio imperante en la casa —cosa poco común,  anormal del todo—, decidieron llamar a los bomberos. Estos, después de forzar la puerta, se toparon con el macabro hallazgo y notificaron a la policía. La policía se hizo presente de inmediato y, más que de inmediato, iniciaron las investigaciones. Se espera de un momento a otro el dictamen del médico forense.

        Entra AYUDANTE y le entrega hoja de papel.

NOTICIADOR
Y aquí está, señoras y señores, el resultado: Los médicos dicen que fue un infarto al miocardio y que murió mientras dormía. La policía insiste en que el enemigo público número uno fue brutalmente asesinado. Darán detalles luego. Un vecino que vio cuando lo llevaban a la morgue, asegura que no se trata del enemigo público número uno y que es el cuerpo de otra persona. (PAUSA. MIRA EL RELOJ) Durante los siguientes sesenta minutos —con comerciales y todo— daremos un reportaje especial del enemigo público número uno, tratando de llegar al meollo de los hechos que motivaron esta exclusiva de última hora, para que usted juzgue y llegue a su propia conclusión. Quizá así se encuentre la verdad sobre la vida, pasión y muerte de este controversial personaje público. Pero antes, un mensaje de nuestros patrocinadores.

TRANSPARENCIA: Automóvil de insultante lujo. Simultáneamente, proyección cinematográfica de algún comercial de automóviles, sin sonido. MODELO con una señal de tránsito en la mano. La señal ilustra una curva muy cerrada y el texto: Curvas Peligrosas.

MODELO
Siéntase poseída en este ambiente lujurioso… Siéntese… La palanca es de cuatro velocidades adelante y una por atrás… Siéntalo… Cuando vaya a más de cien kilómetros por hora, aplique los frenos de poder suavemente para que se le pare de una vez por todas…

        NOTICIADOR y AYUDANTE asoman sorprendidos.

MODELO
Ah… Sienta las curvas, se agarran suavemente al principio, sin prisas, y se pisa el acelerador a fondo cuando llega la recta… Entonces, déjese llevar sin temores, sabiendo que las llantas están firmemente pegadas al asfalto.

NOTICIADOR y AYUDANTE han llegado junto a ella y empiezan a sacarla sin violencia pero firmemente. MODELO no se resiste cuando la levantan en vilo, pero continúa muy excitada.

MODELO
No olvide que debe ajustarse el cinturón de seguridad al subirse, porque cuando se baje quedará tan complacida que… ¡mmm-mmm-mmm-mmm-mmm!

Ya la han sacado y se evidencia claramente que la amordazaron. NOTICIADOR vuelve con la mejor de sus sonrisas.

NOTICIADOR
No cabe duda que todo evoluciona, que el ritmo de la vida moderna exige cada vez más… dando cada vez menos a cambio. Nuestro amigo, el enemigo público número uno lo sabía. Y tan es así que, en contra de todo convencionalismo, se fue a la montaña más alta y de vegetación más espesa. Y allí, entre clorofila y mosquitos, entre fango y flores, entre soledad y universo, meditó durante cuarenta días con sus noches. (TRANS.) Pero no nos adelantemos a los acontecimientos. Vayamos al primer tiempo de nuestro reportaje.





PRIMER TIEMPO:

TRANSPARENCIA: Vidriera de sala cuna de hospital. PAPÁ y MAMÁ observan.

PAPÁ
Le pondremos Fleder. Se llamará como yo, como mi padre, como mi abuelo.

MAMÁ
Es tan hermoso.

PAPÁ
Tiene manos grandes y fuertes. Será carpintero como yo. Y mi padre. Y mi abuelo.

MAMÁ
Su mirada es tan dulce.

PAPÁ
Yo podía meter un clavo en el lugar justo a los dos años. Aprendí a usar la sierra a los cinco.

MAMÁ
Y es tan pequeñito e indefenso.

PAPÁ
Le enseñaremos los primeros números y letras, eso sí, Alguien tendrá que hacerse cargo del taller cuando yo muera.

MAMÁ
Tejeré para él los más lindos vestidos.

PAPÁ
Se llenará  de aserrín y barniz.

MAMÁ
Irá a la escuela superior y será presidente. Lo dicen las líneas de su mano.

PAPÁ
¡Presidente! (RÍE) ¿Un hijo de carpintero presidente? Me conformaré con que haga los mejores ataúdes del país como yo y mi padre y mi abuelo.

MAMÁ
Será lo que Dios quiera.

PAPÁ
Será lo que soy yo… ¡Y Dios lo quiere!

        NOTICIADOR en set de televisión.

NOTICIADOR
Y Fleder aprendió a usar la sierra, el martillo y el formón. A los seis años construyó él solito, sin la ayuda de nadie, su primer ataúd. Parece ser, si los informes que tenemos son correctos, que dicho ataúd fue usado en los funerales del primogénito del ministro de la guerra que murió de meningitis. Lo cierto es que el padre estaba tan orgulloso de su pequeño vástago que, a su firma grabada en cada ataúd, agregó “e hijo”. Fleder e hijo. (PAUSA) La madre, mientras tanto, seguía creyendo firmemente que Fleder sería alguien importante y esperaba paciente, calladamente, una señal. Y la señal llegó cuando Fleder tenía siete años de edad. Y el pequeño, con sus ya callosas manos, confeccionó el ataúd para su padre. Y como homenaje póstumo lo firmó “Fleder, el último”.

Entra AYUDANTE y le habla al oído. NOTICIADOR asiente con la cabeza. AYUDANTE sale.

NOTICIADOR
Lamento tener que suspender este reportaje, pero sólo será por unos minutos. Solicitan mi presencia en la morgue. Al final,  ustedes saldrán ganando porque iré con todo y cámaras y les traeré una película de primera. Así que no cambien de canal. Seguimos con nuestra programación regular.

NOTICIADOR sale. Se apagan las luces para encenderse de inmediato. Sonido de estática y palabras ininteligibles. Apagones. Ruidos molestos. Situación desesperante. Apagón de treinta segundos… Ni un sonido durante se tiempo. Entra la luz y se oyen varios disparos. La siguiente escena es al estilo de los programas de televisión extranjeros de policías y ladrones. Los personajes en escena harán mímica únicamente. Grabación tendrá música, disparos y texto, para dar idea del doblaje al español. Las voces con marcado acento mexicano. Disparos y sirenas de carros policíacos.

DETECTIVE
(GRABACIÓN) ¡No te muevas, Renacuajo, o te hacemos polvo!

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡A ver si pueden, polizontes!

Nuevos disparos. Los dos se parapetan. Entran varios policías uniformados a la manera gringa y se ocultan también, disparando.

DETECTIVE
(GRABACIÓN) ¡Será mejor que te entregues, méndigo!

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡Vengan por mí si son tan machos!

POLICÍA UNIFORMADO
(GRABACIÓN) ¿Llamamos al army, teniente?

OTRO UNIFORMADO
(GRABACIÓN) Creo que no será necesario. Mery tratará de convencerlo.

        Más disparos y muchos gritos y maldiciones.

DETECTIVE
(GRABACIÓN) ¡Alto al fuego! ¡Ahí viene Mery!

        Entra MERY, gringa típica, rubia y con trenzas. Trae un bebé en brazos.

MERY
(GRABACIÓN) ¡Renacuajo, no dispares!

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡Fuera de aquí, Mery, esta es cosa de hombres!

        Llanto de niño recién  nacido.

DETECTIVE
(GRABACIÓN) Es tu esposa, Renacuajo. Tiene a tu hijo en brazos. ¿Por qué mejor no te entregas de una vez por todas y nos evitas gasto de plomo y energía?

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡A un lado, Mery!

MERY
(GRABACIÓN) ¡Entrégate! Mientras hay vida hay esperanza… Preferible la cárcel a un tumba fría. ¿De qué serviría todo si te matan?

        Más sirenas.

DETECTIVE
(GRABACIÓN) ¿Vienes o vamos por ti?

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡Aquí los espero! ¡A un lado, Mery!

MERY
(GRABACIÓN) ¡No… No!

        Más disparos. MERY cae herida. RENACUAJO corre a auxiliarla.

RENACUAJO
(GRABACIÓN) ¡Asesinos! ¡Me los han matado! ¡Mery! ¡Hijo!

RENACUAJO se pone a disparar como loco. Policías responden al fuego. Cae la luz y el sonido de golpe. Pequeña pausa. Silencio. NOTICIADOR en set de televisión.

NOTICIADOR
Y seguimos con nuestro reportaje. Lo prometido es cumplido en tiempo récord.

NOTICIADOR, micrófono en mano, camina hacia grupo de personas en la morgue: MÉDICO, PRACTICANTE, AUTORIDAD, MONJA.

NOTICIADOR
Nos encontramos en la morgue metropolitana esta mañana radiante. La razón es ampliamente conocida por todos ustedes. El enemigo público número uno ha fallecido. La causa es todavía desconocida, pero se especula mucho al respecto. Cono nosotros el doctor que practicó la autopsia y su ayudante. (A ELLOS) ¿Mucho trabajo, doctores?

MÉDICO
Bueno… El de siempre. Unos van y otros vienen.

PRACTICANTE
Sí. Muy temprano, por ejemplo, tuvimos a un sujeto que apareció flotando en el río.

MONJA
Que Dios lo tenga en su gloria.

MÉDICO
En efecto. Tenía las manos atadas a la espalda y múltiples erosiones y golpes en el cuerpo.

NOTICIADOR
¿Asesinato?

MONJA
Perdónalos, señor…

MÉDICO
Suicidio.

NOTICIADOR
¿Estamos hablando del mismo sujeto?

PRACTICANTE
Sí, el que encontraron río abajo.

NOTICIADOR
¿Suicidio? ¿Y no que tenía  las manos atadas a la espalda, pues?

MÉDICO
Eso es lo extraordinario del caso. Mire, en mis años como médico forense nunca me topé con algo semejante.

PRACTICANTE
No había agua en sus pulmones.

MÉDICO
Por lo que descartamos que se ahogara.

MONJA
Lo que Dios dé que el hombre no lo quite.

PRACTICANTE
Cuando se lanzó al agua ya estaba muerto.

NOTICIADOR
Un momento, por favor. Barajéenmela más despacio. ¿Dicen que cuando se lanzó al agua ya estaba muerto? ¡No es posible!

MÉDICO
Yo sólo soy el médico forense.

PRACTICANTE
Y yo su ayudante.

MÉDICO
Sabemos que falleció antes.

NOTICIADOR
Pero…

AUTORIDAD se acerca rápido. Durante todo el tiempo ha permanecido con la oreja parada.

AUTORIDAD
Este es el boletín oficial, señor periodista. (SE LO ENTREGA) El hombre murió de sincope cardiaco. (A LOS MÉDICOS) ¿No es así, doctores?

LOS DOS
Mjú.

NOTICIADOR
(LEYENDO EL BOLETÍN CON LA VISTA) Ah.. Entiendo. (A AUTORIDAD) ¿Se conoce la identidad del hombre?

AUTORIDAD
Casualmente tenía una carta en el bolsillo… Dentro de un plástico impermeable, es claro. Un líder obrero que determinó suicidarse…

MONJA
En el nombre del Padre…

AUTORIDAD
…acosado por sus acreedores.

MONJA
…en el nombre del Hijo…

AUTORIDAD
…se meten en cada cosa, que…

MONJA
…en el nombre del Espíritu Santo.

NOTICIADOR
(A AUTORIDAD) Y en el nombre de los televidentes, muchas gracias. (A MÉDICOS) ¿Qué pueden decirnos de nuestro amigo el enemigo público número uno?

MÉDICO
Su muerte no fue causada por…

AUTORIDAD
(SOBRE MÉDICO) El caso está en su fase sumaria. No se puede dar información todavía. Sin embargo, estoy autorizado para decir que fue asesinado. Y que los autores, dondequiera que se oculten, serán castigados por ese crimen sin nombre.

MONJA
(PERSIGNÁNDOSE) Amén.

NOTICIADOR
(EN SU SET) Como pueden ver, no se sabe nada en concreto. Volveremos después de la identificación del canal.

        Transparencia:
        69. Música íntima.

GRABACIÓN
Este es el sesenta y nueve, mi favorito.
Afuera las tensiones y los zapatos.
A disfrutar del más sano y fabuloso entretenimiento, solaz y esparcimiento.
Permanezcan conectados y a gozar de lo lindo.
Con el sesenta y nueve.
Su favorito.

        NOTICIADOR en su set de televisión.

NOTICIADOR
Al morir papá Fleder, el taller era un negocio próspero y bien acreditado. Los ataúdes eran solicitados en todo el país y uno que otro lugar del extranjero. La madre, entonces, decidió cimentar la educación superior de su hijo. Vendió el taller y se puso a dar dinero a interés. Y ahorraba hasta el último centavo para cuando ese momento llegara. Y el momento llegó cuando Fleder tenía trece años.

        Transparecia:

Ambiente familiar en casa acomodada. MADRE y FLEDER sentados, frente a frente.

MADRE
No has sido el número uno en tu clase, pero sabes leer y escribir; aunque el cero te siga dando problemas.

FLEDER
Es demasiado complejo, mamy. No entiendo por qué un cero a la izquierda nada significa.

MADRE
Eres ya un hombre. No muy brillante que se diga, pero de eso se encargará la vida. Irás a recorrer los continentes. Aprenderás todo lo que hay que aprender sobre las cosas de aquí, de allá y de más allá. Sobre los tejes y manejes de la política. Sicología. Income tax. Computación. Energía nuclear. Electrónica. Beberás todo el conocimiento en la fuente misma de origen. Nada de segunda mano. Meditarás. Palparás. Inquirirás. Adquirirás sensibilidad y capacidad para ser duro de corazón, calculadamente frío, inflexible y generoso. Todo en la medida justa de circunstancias y necesidades. Podrás, en fin, al fin, enfrentarte a tu destino sin temores de ninguna clase. ¿Has comprendido, hijo?

FLEDER
Sí, mamy.

MADRE
Bien. Ha llegado el momento de la despedida.

FLEDER
Sí, mamy.

MADRE
Que Dios te acompañe, hijo.

FLEDER
Adiós, mamy.

        FLEDER empieza a salir.

MADRE
No olvides abrigarte bien. Recuerda que eres muy delicado de los bronquios.

FLEDER
(DESAPARECIENDO) Sí, mamy.

MADRE
Y no dejes de mandarme una postal.

FLEDER
(DESDE AFUERA) No, mamy.

MADRE
Y cúrate ese pie de atleta, Fleder. ¡Un hombre como tú deberá oler a santidad!

FLEDER
(LEJOS) ¡Sí, mamy!

FLEDER se ha ido. MADRE se seca una furtiva lágrima. Pausa silenciosa. Entra DAMUS. La imagen se congela, a la manera de una proyección cinematográfica que se detiene en un cuadro en el preciso momento en que DAMUS entra a escena. Los dos permanecerán inmóviles, mientras NOTICIADOR explica.

NOTICIADOR
Aquí viene una etapa sumamente oscura en la vida de Fleder y su familia. Nadie afirma nada con certeza. Ningún dato puede ser comprobado. Lo poco que sabemos estará en esta sección del reportaje. Trataremos, pues, en la medida de lo posible, de poner en orden las pocas piezas que tenemos del rompecabezas. (PAUSA. SE DIRIGE A ELLOS, QUIENES PERMANECERÁN INMÓVILES) Damus, ya que tenemos que llamarlo de alguna manera, jugó un papel muy importante en la vida, pasión del enemigo público número uno. Ignoramos si también tuvo algo que ver con su muerte, pero esto ya es meramente especulativo. Damus, a secas. Llegado, según unos, de algún reino perdido en el oriente, Otros aseguran que es un mago norteamericano de origen judío. No se sabe. Lo cierto es que la primera noticia que se tiene de ese oscuro personaje, se remonta al día de la partida de Fleder. Y lo que Damus y la madre conversaron, pudo ser algo así:

        DAMUS y MADRE se animan, continuando la acción de antes.

DAMUS
Está hecho.

MADRE
Sí. Y lo dejé partir.

DAMUS
Cuando vemos la flecha dirigirse al blanco, no pensamos en el arco y en el arquero. Y todos, arco, arquero, flecha, blanco, son uno mismo.

MADRE
Es tan joven.

DAMUS
El diamante en bruto adquiere su verdadero valor y belleza en manos del tallador. Cada faceta es mucho del aliento de ese hombre.

MADRE
Es tan inexperto.

DAMUS
El conocimiento llega a través de la piel. Entra por ella y se aloja en todos los centros nerviosos. La piel es más que una cáscara. Es el imán del universo.

MADRE
¿Hicimos bien, Damus?

    
DAMUS
Juguemos a la ouija a la luz de las velas. Las respuestas principian cuando han finalizado las preguntas.

Quedan inmóviles en la misma posición del principio. NOTICIADOR se acerca.

NOTICIADOR
Como dije antes, sin testigos es muy difícil, imposible, reconstruir una conversación; máxime cuando se trata de un personaje sin antecedentes de tipo alguno como el tal Damus. Otra versión de la escena sería más o menos como sigue:

        DAMUS y MADRE se animan.

DAMUS
Es un  buen muchacho.

MADRE
El mejor, Damus.

DAMUS
Triunfará. Lo dice el brillo de sus ojos.

MADRE
Se ve tan feliz… Y la felicidad da tanto miedo a veces.

DAMUS
Tengamos fe. Cuando Fleder vuelva, todo será diferente. Un cambio total se llevará a cabo en las estructuras de este pueblo. Y él, con sus manos, construirá algo mejor que un ataúd. Edificará una nación sin olor a naftalina.

MADRE
Es demasiada responsabilidad para un solo hombre.

DAMUS
Moveremos la montaña juntos. Seré su punto de apoyo. Caminaré con él, un paso atrás, un paso adelante, siempre a su lado sin que él lo sepa.

MADRE
Rogaré a Dios porque así sea.

DAMUS
Así será.

        Quedan nuevamente inmóviles. NOTICIADOR pensativo.

NOTICIADOR
La cosa se embrolla cada vez más. Antes, el lenguaje de Damus fue un tanto metafísico, metafórico. Que si la flecha y el arquero; que si el diamante en bruto y el tallador; que si la piel es el imán del universo; que si la ouija, las preguntas y las respuestas. Puro palabrerío que no nos da ninguna luz. En la segunda posibilidad, Damus nos habla en un plano más material, por decirlo de alguna manera; y nos sugiere que él hará posible -no sabemos todavía en qué forma- que Fleder construya, haga realidad el sueño de un pueblo. (PAUSA) Pero la última palabra no está dicha todavía, porque el diálogo pudo haber sido de esta manera:

        DAMUS y MADRE se animan. NOTICIADOR observa atento.

DAMUS
Buenas tardes. Soy Damus. La puerta estaba abierta y me tomé la libertad de entrar.

MADRE
¿Quién es usted?

DAMUS
No se alarme, señora. Soy el actual propietario del taller que fuera de su esposo, que en paz descanse.

MADRE
Oh, señor Damus. Pase, por favor. Siéntese. Le ruego me disculpe.

DAMUS
Está bien. No tiene por qué disculparse. (PAUSA) Le extrañará mi visita, ¿no es así?

MADRE
La verdad, sí. ¿En qué puedo servirlo, señor Damus?

DAMUS
Soy yo quien viene a hacerle un servicio, señora.

MADRE
No comprendo.

DAMUS
Fleder es todo un hombre. Lo vi marcharse. Los hombros rectos, erguido, el mentón en alto. Caminando con paso firme en busca de Eldorado, la piedra filosofal, Shangrilá, el paraíso, como se le quiera llamar…

MADRE
Un momento… ¿Cómo sabe…?

DAMUS
Usted y yo tenemos algo en común, señora. Ambos leímos en la palma de su mano.

MADRE
¿Cómo es posible si usted nunca…?

DAMUS
Estuve en el alumbramiento. Soy el médico que lo trajo al mundo. ¿Me reconoce?

MADRE
La verdad, no.

DAMUS
Soy el contratista que vendía a Fleder toda la madera y materiales para el taller. Mis precios eran los más favorables del mercado. ¿Me reconoce ahora?

MADRE
No.

DAMUS
Soy el abogado que cerró el negocio de la venta del taller. Soy el maestro de Fleder en sus primeras letras y números. Soy, para no cansar, el pariente lejano que financió cada una de las operaciones de préstamo a interés. Y si aún no me reconoce, es mi culpa, señora. Soy un profesional. Como el camaleón…

        Quedan inmóviles. NOTICIADOR sonríe.

NOTICIADOR
¡Es el colmo! Esta versión sí que es fantástica. Se ve que quien la sugirió tiene mucha imaginación. Nos habla de un hombre inmensamente rico y poderoso, capaz de mimetizarse a voluntad. De un mecenas o algo parecido. Es, en pocas palabras,  el tallador del diamante en bruto que con su aliento hace posible todo para ese niño, ese hombre que más tarde se convirtiera en el enemigo público número uno. Ver para creer. Y como para ver, analizar y llegar a una conclusión que nos acerque, siquiera, a la verdad es que estamos aquí, vaya esta última posibilidad del diálogo entre Damus y la madre de Fleder, el último:

        DAMUS y MADRE se animan. NOTICIADOR va a su set. Se sienta.

DAMUS
¡Vaya, ya era hora!

MADRE
Eres injusto.

DAMUS
¿Por qué? El muchacho ya estaba necesitando aire puro. Entre tus faldas no podía respirar.

MADRE
Es un niño. Trece años apenas.

DAMUS
Déjalo crecer. Y no te lamentes. Se tomó la determinación. Preparamos cuidadosamente todo para su partida. Ni un cabo suelto. Ni una posibilidad sin análisis. Itinerario. Paradas. Puntos de referencia. Contactos. Amigos... ¿Qué más se puede desear?

MADRE
Hablas así porque no eres el padre.

DAMUS    
Podría ser Napoleón, que para el caso es lo mismo.

MADRE
Pero no lo eres.

DAMUS
Ni lo uno ni lo otro. O ambos. Nunca se sabe con certeza.

MADRE
Hablo en serio.

DAMUS
También yo. Si te refieres a si participé en la copulación del pequeño Fleder, no. No estuve allí. No soy el padre. No por sangre.

MADRE
Y como tal, no puedes sentir amor o pena o intranquilidad.

NOTICIADOR
(SOBRE ELLOS) El diálogo se transforma en discusión doméstica, lo que no viene al caso.

DAMUS y MADRE seguirán en lo suyo. Recordar que se está sugiriendo una porción filmada dentro de un noticiero televisivo.

DAMUS
Amor, pena, intranquilidad. ¿Vas a decir ahora que lo odio?

MADRE    
Sí. Lo odias. Quisieras verlo muerto.

NOTICIADOR
Ruego a los televidentes que disculpen. Debe tratarse de un lamentable error…

DAMUS
¿Cómo puedes siquiera pensar en eso?

MADRE
Con tu actitud lo demuestras.

DAMUS
No tienes derecho a decirlo después de todos estos años…

NOTICIADOR
¡Controles…! ¡Suspendan la proyección!

MADRE
Y pensar que he sacrificado ta…

        La imagen se congela, como antes.

NOTICIADOR
(SONRÍE FORZADAMENTE) Suplico a ustedes, amables televidentes, borrar de su memoria esta descabellada versión. No deberán tomarla como elemento de juicio para su decisión final. Gracias.

Tremenda explosión. Se va la luz. Pausa silenciosa. Entra la luz. NOTICIADOR  en el set de televisión, como antes. MADRE  y DAMUS han salido de escena durante el apagón. Ni una huella de violencia, pero habrá un marcado olor a pólvora y humo. La luz cambiará de intensidad y color, provocando molestia visual.

NOTICIADOR
No pasa nada. No ha sido nada. Un fusible quemado interrumpió nuestro reportaje, pero ha sido reemplazado en tiempo récord y todo sigue igual…

        Disparos aislados y ráfaga de ametralladora muy cerca.

NOTICIADOR
Aunque las condiciones atmosféricas no nos son propicias, trataremos de llegar a ustedes…

Sirenas de ambulancias y nuevos disparos. NOTICIADOR gesticula, pero no podemos escuchar bien lo que dice.

NOTICIADOR
…de este magnífico y exclusivo reportaje que…

Sonido de fuerte combate. Sigue gesticulando, tratando de hacerse escuchar en medio del ruido.

NOTICIADOR
…mantengan la sintonía de…

Otra explosión. Apagón general. Silencio. La luz se enciende. NOTICIADOR de pie, en el centro del escenario con aire más que solemne.

NOTICIADOR
En nombre del nuevo gobierno de la república, informo que todo está bajo control. Encabezando la cadena nacional de radio y televisión, canal sesentinueve. Su favorito.

        CAE LA LUZ

INTERMEDIO





SEGUNDO TIEMPO:

        Transparencia:

Panorámica de montaña. Noche. Sonido de animales silvestres en noche de montaña. FLEDER en actitud de meditar. Entra DAMUS

DAMUS
La soledad es buena compañía, amigo Fleder, pero nos priva de muchos placeres.

FLEDER
¿Acaso lo hay mayor que la introspección?

DAMUS
Un vaso de vino, un trozo de pan de centeno con queso roquefort, una cama de agua, una real hembra…

FLEDER
Un sendero, una rosa, el canto, la plegaria.

DAMUS
Desayuno en la cama con lectura de diarios y revistas, levantada tarde, baño de inmersión con burbujas aromáticas, auto con chofer, despacho privado, cierre de negocios con aperitivo, almuerzo ejecutivo en el hotel tal, acueste con secretaria en el motel tal, tarde deportiva en el golf club, cena íntima con levante, fornique con levante, tele a color de control remoto…

FLEDER
Placeres materiales todos.

DAMUS
Hay también de los otros, querido Fleder. Su retrato en la galería de hombres ilustres a la patria. Su nombre en las gloriosas páginas de la historia. Alguna calle céntrica se llamará calle Fleder. El hospital de cancerología se llamará hospital Fleder. O el leprocomio. O el de tuberculosos. El instituto de señoritas de oriente se llamará instituto de señoritas Fleder. O el de occidente. Padres amorosos pondrán Fleder a sus pequeños hijos en recuerdo del bienhechor aquel. Un día al año será dedicado a honrar su memoria. Su efigie estará en el papel moneda. Billetes de alta denominación, por supuesto. En sellos postales. En posters policromos. La nueva constitución política será la constitución Fleder. Y Fleder será un medidor de tiempo. Antes de Fleder. Después de Fleder. Antes de Fleder, el caos. Después…

        Pausa. Los dos se miran en silencio.

DAMUS
Estamos frente a una gran pantalla de televisión. Podemos ver el programa y tragarnos los comerciales. O, en el mejor de los casos, lanzar un florero contra la pantalla para no seguir mirando…

        Se acerca a FLEDER. Pone la mano en su hombro.

DAMUS
Venga. Cambiemos juntos el canal. Le aseguro que esta vez no habrá comerciales.

        NOTICIADOR en set de televisión.

NOTICIADOR
Bueno. Esto último sobre comerciales fue en sentido figurado, se entiende. Quiso decir que como están las cosas…

        Transparencia:

Censurado. Sigue gesticulando, pero no oímos nada, hasta que se apaga la transparencia.

NOTICIADOR
…que no es posible seguir en esa actitud contemplativa y que se necesita…

        Transparencia:
        Censurado. Mismo juego de mímica.

NOTICIADOR
…y que unidos todos, como un solo hombre…

        Mira hacia fuera. Traga saliva. Transición rápida.

NOTICIADOR
Este es su canal favorito. El sesentinueve. Encabezando la cadena nacional de radio y televisión.

        Transparencia:

Parque público. Banda de pueblo toca un aire marcial. FLEDER estará sentado en una banca. Entra DAMUS y camina hacia él.

DAMUS
No hace frío. No hace calor. Un día deliciosamente templado. Se pueden aspirar, una a una, las notas de ese aire marcial. (TARAREA, IMITANDO, LOS BAJOS DE LA MARCHA) Todo se mira mejor en domingo. (PAUSA LLENA DE MÚSICA) La última vez que nos vimos también era domingo. Noche de luna llena en el jardín de los olivos.

FLEDER
(NO HA ESCUCHADO, POR LA MÚSICA) ¿Cómo dice?

DAMUS
Digo que es una grata coincidencia encontrarnos aquí, del otro lado del mundo. ¿Fue en Moscú o en Egipto?

FLEDER
Palestina.

DAMUS
Eso fue antes.

FLEDER
Washington.

DAMUS
Es fue después.

FLEDER
Después de Hiroshima, Berlín, Irlanda del Norte, Vietnam…

DAMUS
(SONRÍE) Lo que nos hace viejos conocidos. Vayamos a un lugar tranquilo donde podamos conversar.

        La marcha finaliza.

DAMUS
No será necesario. (SE SIENTA) ¿Y bien?

        Pausa tensa. FLEDER se pone de pie y da unos pasos pensativo.

FLEDER
Durante todos estos años de encuentros coincidenciales, como usted los llama, he llegado a la conclusión de que el  mundo es tan pequeño que cabe en la palma de mi mano con carreteras, montañas, océanos, ciudades, gente. Gente, sobre todo. Y quisiera saber en qué momento de la historia humana se perdió la grandeza de espíritu…

Banda ataca otro aire marcial. Tratan de hacerse oír. Gesticulan inútilmente.

FLEDER
(APROVECHANDO PEQUEÑA PAUSA MUSICAL) ¡No importa!    

NOTICIADOR en set de televisión. Finaliza la marcha después de un momento.

NOTICIADOR
(LEYENDO) “Tres perros, catorce gatos, un loro, dos periquitas australianas, una colección de  boletos de autobús -todos capicúa-, un facsímil del acta de independencia, la fotografía autografiada del papa Juan XXIII…” (PAUSA. DEJA DE LEER) Estoy adelantándome a los hechos. Equivocadamente leía a ustedes la hoja que contiene el inventario completo de las pertenencias del enemigo público número uno en el momento de su muerte. (TOMA OTRA HOJA. ASPIRA PROFUNDO. LO SIGUIENTE SIN RESPIRAR) El  nuevo gobierno de la república patentiza su dolor por el desaparecimiento físico de uno de los hijos dilectos de la patria y decreta tres días de duelo con los máximos honores civiles y militares. (TOMA AIRE) Asimismo aprovecha para enviar un sentidísimo pésame a su madre, familiares, amigos, correligionarios y hermanos del  mundo entero, prometiendo un ejemplar castigo a los autores intelectuales y materiales de tan cobarde asesinato. (TOMA AIRE) Y como homenaje póstumo, presentará  no un simple reportaje —como se venía efectuando—, sino capítulos novelados de una hora diaria. (PEQUEÑA PAUSA. SU RESPIRACIÓN SE TORNA NORMAL) Con ustedes, pues, el primer capítulo de nuestra telenovela “Fleder, el último”.

        Transparencia:

Cementerio Metropolitano. Día. Marcha fúnebre. Cortejo que entra. CURA, AUTORIDAD CIVIL, AUTORIDAD MILITAR, DEUDOS, AMIGOS, ENEMIGOS, MADRE, jaula con CATORCE GATOS, jaula con TRES PERROS, estaca con LORO, jaula con DOS PERIQUITAS AUSTRALIANAS.

CURA
Oremos. (ORAN)

DEUDO
Lloremos. (LLORAN)

AUTORIDAD CIVIL
Está pesadito.

AUTORIDAD MILITAR
El plomo ayuda.

AMIGO
Fleder, Fleder…

CASI TODOS
¡Raa, raa, ráaaaaaaa!

        Colocan el ataúd en el centro de la escena.

AUTORIDAD CIVIL
Vayamos al obituario.

AUTORIDAD MILITAR
Y a las salvas de fusilería.

CURA    
Antes oremos por su alma. (ORAN)

MADRE
Lloremos por él. (LLORAN)

CURA
Oremos por sus pecados. (ORAN)

        Entra DAMUS. Todas las miradas convergen en él.

MADRE    
Lloremos por los nuestros. (LLORAN)

DAMUS
¿Es este el sepelio de Fleder?

TODOS
Mjú.

DAMUS    
Lamento legar tarde, pero me confundí antes. Estuve rodilla en tierra, más de media hora, frente al ataúd de un corredor de bienes raíces que murió de hipo. Hasta que se me ocurrió preguntar.

        Todos quedan inmóviles.

VOZ NOTICIADOR
¿Qué pasa, controles? Este es el capítulo final.

VOZ CONTROLES
No puede haber error, estudio. Es el capítulo uno.

VOZ NOTICIADOR
¿Empezando por el funeral?

VOZ CONTROLES
Ahí sí que no podemos hacer nada, estudio. Sugiero preguntarle al escritor.

VOZ NOTICIADOR
¡Estos escritores de televisión…! ¡Corre video-tape, controles!

VOZ CONTROLES
¡Corriendo!

        Todos siguen secuencia de movimiento que interrumpieron.

DAMUS
Cuando me enteré de su muerte, andaba yo por África del Sur. Linda y salvaje tierra convulsionada por algunas guerras intestinas. Volé directamente.

        Pausa. Silencio. Todos lo miran fijamente.

DAMUS
Se preguntarán qué hago aquí, quién soy, a qué he venido. Básteles saber que siempre…

FLEDER
(DESDE ADENTRO) Nunca…

DAMUS
(SIN DARSE POR ENTERADO) siempre…

        Entra FLEDER. Ninguno, excepto DAMUS, se percatará de su presencia.

DAMUS
Siempre o nunca. Difícil saberlo con certeza, amigo Fleder.

FLEDER y DAMUS en un aparte de la escena. Los demás siguen en el funeral.

CURA
In nomine patrii et fillii et spiritus sancti…

FLEDER
No habrá desfile ni discursos…

AUTORIDAD MILITAR
En nombre del estado…

FLEDER
Ni alegría en las calles…

AUTORIDAD CIVIL
Como representante del pueblo…

FLEDER
No habrá levantamientos en los cuarteles…

CURA    
De este hijo de…

FLEDER
Ni toque de queda…

MADRE
Se nos fue…

FLEDER
Ningún ejército invasor…

AMIGO
Será vengado…

FLEDER
Ningún caudillo…

ENEMIGO
El final esperado…

FLEDER
Nada que salvar…

PERROS
Guau, guau…

FLEDER
Nada que liberar…

GATOS
Miau, miau…

FLEDER
No se dirá una palabra…

LORO
A estirar la patita…

FLEDER
Y todo quedará dicho en ese instante.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Tienes razón, hermana…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…lo mal que sabe la carne humana.

DAMUS
Lo felicito, amigo Fleder.

FLEDER
¿Por qué?

DAMUS
¡Por el plátano! No se arrepentirá de nuestra alianza.

CURA
Polvo eres y en polvo te convertirás. (SALE)

AMIGO
(A AMIGA) Estoy que se me derrite la miel.

AMIGA
¿No está oyendo lo que dice el cura? Nada de polvos. (SALEN)

AUTORIDAD CIVIL
Adiós, enemigo. (SALE)

AUTORIDAD MILITAR
Nunca te olvidaremos, amigo. (SALE)

AMIGO
(A OTRO AMIGO) Lo dice por los problemas que Fleder hizo pasar al ejército.

OTRO AMIGO
¡Shhhhhhh! Las lápidas tienen oídos. (SALEN)

MADRE
¡Creo que me va a dar algo! (SALE)

PERROS
¡Guau, guau! (SALEN)

GATOS
¡Miau, miau! (SALEN)

LORO
Estos ya se quieren almorzar también a la viejita. (SALE REFUNFUÑANDO)

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Y como indica la experiencia…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…hay que tener mucha paciencia, decencia, condescendencia, y algo de hambre. (SALEN AMBAS)

Y han salido todos, excepto DAMUS y FLEDER. Después de silenciosa pausa, DAMUS se sienta sobre el ataúd que quedara en el centro.

DAMUS
Ya no se fabrican tan buenos como antes, amigo Fleder. Creo que lo mismo ocurre con la mayoría de personas.

FLEDER
Tiene razón. (CAMINA HACIA ÉL) Permítame.

        Lo toma del brazo y lo quita del ataúd.

DAMUS
¿Qué ocurre?

        FLEDER levanta la tapa y se mete dentro.

FLEDER
Es hora del sueño de los justos.

Cierra  la tapa. DAMUS observa en silencio. Toma la flor de su solapa y la coloca sobre el ataúd.

DAMUS
Descanse en paz, amigo Fleder.

Se encoge de hombros y sale. Pausa. La luz cambia de tonalidad. Música. En grupos van entrando los CATORCE GATOS  y los TRES PERROS, el LORO y las PERIQUITAS AUSTRALIANAS.

PERRO UNO
¿Qué estaba yo haciendo en ese momento?

LORO
Matando pulgas.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Un comportamiento cruel…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…porque las pulgas lo estaban matando a él. (RÍEN)

GATO UNO
Cállense, viejas cotorras.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
¿De dónde saliste tan quisquilloso…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…gato sarnoso…?

PERRO DOS
¡Ya, ya! Estamos tratando de recordar.

PERO TRES
Y con tanto ruido no se puede ni pensar.

GATO DOS
Yo andaba por el tejado.

GATO TRES
Yo estaba cazando en el tapanco.

GATO CUATRO
Yo dormía.

GATOS CINCO, SEIS, SIETE, OCHO, NUEVE, DIEZ, ONCE, DOCE y TRECE
¡Yo también!

GATO CATORCE
Yo no puedo decir lo que hacía, sin ofender a las señoras.

LAS DOS PERIQUITAS AUSTRALIANAS
(AL UNÍSONO) ¡Señoritas!

LORO
De la niña del ojo, viejas putas.

LAS DOS PERIQUITAS AUSTRALIANAS
¡Insolente!

PERRO DOS
¡Ya, ya!

PERRO UNO
Yo no me puedo acordar.

GATO UNO
Tampoco yo.

LORO
En resumen y para no cansar, ninguno de nosotros vio nada esa terrible noche…

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Nosotras sí vimos y oímos…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
..pero, por joder, no lo decimos.

        Todos se acercan a ellas.

AD LIB
¿Es cierto eso? ¿Qué pasó? ¿Qué miraron? ¿Qué oyeron? (ETC)

        Pausa silenciosa. Todos expectantes.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Vámonos de aquí, hermana…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
Si se portan bien, se los decimos la próxima semana.

Las dos salen rápidas. Pausa. Los demás quedan pensativos y preocupados.

PERRO UNO
¿Será cierto?

GATO UNO
Mientras se averigua…

GATO DOS
…nos quedamos con la duda.

        Una pausa. Pensativos. Se rascan. Inquietos.

GATO SIETE
Reconstruyamos la escena.

PERRO TRES
No es mala idea. A ver si así nos acordamos.

PERRO DOS
¿Con pelea y todo?

LORO
Mejor olvidemos el asunto, porque…

GATO NUEVE
¿Estamos o no tratando de recordar lo que pasó la noche en que nuestro protector murió?

TODOS AD LIB
Sí. Claro. Por supuesto. Ni modo. (ETC)

LORO
De acuerdo, pero sin pleito.

PERRO TRES
(A LORO) Mejor te vas a tu estaca, loro, porque si no…    

LORO
Está bien. Está bien. Como quieran.

Va a su estaca refunfuñando. A una señal PERROS y GATOS se dividen formando sendos círculos para ponerse de acuerdo.

LORO
Yo estaba en mi estaca, así que aquí me quedo.

PERRO UNO, después de dar varias vueltas sobre sí mismo, se acuesta.

PERRO UNO
Yo estaba echado.

LORO

(LEVANTÁNDOSE DE UN SALTO, AMENAZADOR) ¡Shóoooooooo!

LORO
(ASUSTADO) Está  bien. Está bien. Como quieran.

        PERRO UNO se acuesta de nuevo.

GATO UNO
Y yo me estaba afilando las uñas en el mueble… (HACE MÍMICA) cuando cayó el florero…

PERRO UNO
¡Ay, sobre mi cola! (HACE MÍMICA) Yo te reclamé.

GATO UNO
Yo dije que había sido un accidente.

PERRO UNO
No lo dijiste.

GATO UNO
Lo dije.

PERRO UNO
(DÁNDOLE UN SOPAPO) ¡Que no!

GATO UINO
(DEVOLVIENDO SOPAPO) ¡Que sí!

        Un par de sopapos más de cada uno.

GATO UNO
¡A mí los míos!    

        Todos los GATOS entran en la pelea.

PERRO UNO
¡A mí los míos!

Todos los PERROS también. Se arma la molotera entre ladridos y maullidos y resoplidos. LORO en su estaca, muy emocionado.

LORO!
(AD LIB) ¡Cuidado…! ¡Eso no se hace así…! ¡Sin morder los huevos…! ¡Buena…! ¡Epa…! (ETC)

En el calor de la pelea, se topan contra la estaca y lo derriban. Todos le caen encima.

LORO
(AD LIB) ¡Yyyyy! ¡Ay…! ¡Mi cola…! ¡Mi culo…! ¡A la puta…! ¡Mi pata…! ¡Mi pito…! (ETC)

Poco a poco se van calmando los ánimos, no sin algunos conatos más de pleito.

LORO
¡Me quejaré a las autoridades…! ¡Pediré indemnización!

PERROS Y GATOS
¡Shóoooooooooo!

LORO
Además, se trataba de la reconstrucción de los hechos, y yo no fui derribado de mi estaca aquella noche cuando…

GATOS y PERROS se han mirado, poniéndose de acuerdo. Lo amordazan entre todos.

GATO NUEVE
Así está mejor.

LORO
¡Mmmmmmmmmmm-mmmmmmmmmmm-mmmmmmmmmmmm!

GATO SIETE
¿Y…?

PERRO DOS
¿Y qué?

GATO SIETE
¿A qué conclusión llegamos?

        Pausa. Silencio. Pensativos. Se rascan. Lamen sus heridas.

PERRO TRES
Creo que a la misma de antes.

GATO DOCE
¿Quiere decir que todo fue por nada?

        Entran las DOS PERIQUITAS AUSTRALIANAS.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
¡Idiotas!

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
¡Réquete!

        PERROS y GATOS las rodean, suplicantes.

PERROS Y GATOS
(AD LIB) ¿Qué vieron? ¿Cómo estuvo la cosa? Dígannos… (ETC)

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Todo en esta vida quiere maña…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…así que mejor se los decimos en el capítulo de mañana. (RÍEN)

Salen rápidas. PERROS y GATOS tras ellas, ladrando y maullando como desesperados. El LORO sale lento, quitándose la mordaza.

LORO
¡Estos hijos de un millón, setecientas cuarenta y ocho mil, doscientas cincuenta y tres y medio pares de putas!

Pausa. Queda solo el ataúd en el centro. Entra NOTICIADOR. Trae cara de pésame.

NOTICIADOR
Y como dijo Tim McCoy, ¡yo también me voy! (EMPIEZA A SALIR. SE DETIENE) Porque después de esto, ¡renuncio! ¡En forma irrevocable! ¡No lo soporto! Es el colmo… Quisiera decir algunas cosas al que autorizó esto… ¡Quisiera tener enfrente al escritor de toda esta basura para hacérsela tragar despacio, sin prisas!

        Entra DAMUS. NOTICIADOR le echa una mirada asesina.

NOTICIADOR
¿Es usted el escritor de esta telenovela?

DAMUS
No. Sólo soy el jefe de la policía secreta. (SACA PISTOLA) Su renuncia es aceptada.

        CAE LA LUZ

INTERMEDIO





TERCER TIEMPO:

        NOTICIADORA en set de televisión.

NOTICIADORA
Ha llegado el tan esperado momento de presentar el capítulo final de nuestra telenovela. Durante trescientos sesenta y cinco días, sesenta minutos diarios, les hemos llevado esta historia arrancada de la vida real. Disfrutamos los momentos felices y derramamos muchas lágrimas en los tristes; pero una cosa es segura, todos llevamos en nuestro corazón el recuerdo de ese hombre que hizo realidad el sueño de los abuelos. Y lo amamos por eso. Y lo admiramos más después de conocer paso a paso, lucha a lucha, su vida. Fue un caballero siempre. Para él no existía diferencia entre un amigo y un enemigo. Todos hermanos, decía… (PEQUEÑA PAUSA) Su vida fue, en cierto modo, una carambola -si nos está permitido el término-. De fabricante de ataúdes a estudioso, de estudioso a contemplativo, de contemplativo a místico, de místico a realístico, de realístico a religioso, de religioso a cabalístico y así, hasta elevarse a la categoría de mártir. Murió como había vivido. Luchando. Sus asesinos, como ustedes recordarán, fueron ejecutados y el acto transmitido al mundo entero en vivo y a todo color, vía satélite. (PAUSA) Estamos, pues, satisfechos. Futuras generaciones contarán con el ejemplo de Fleder, el último. (DERRAMA UNA LÁGRIMA. PAUSA) Hemos querido, en esta especial oportunidad, presentar al artífice, al mago, al creador de tan sonado éxito televisivo. Con nosotros, el escritor.

Fanfarria. DAMUS se materializa, gracias a algún truco mecánico o juego de luces.

DAMUS
Atendiendo a las múltiples llamadas telefónicas, cartas y telegramas del público, presento a continuación el número de ilusionismo que me ha hecho famoso en el mundo entero -modestia aparte-. ¿Hay entre el público alguna dama que quiera asistirme..? Usted, por favor… O usted. Gracias. Es fácil. Concéntrese en un color. Cualquiera, no importa. ¿Ya está? Bien. Piense intensamente en el color. Intensamente. Con todos los sentidos. ¿A qué sabe? ¿Cuál es su textura? ¿Su olor? ¿Cómo suena? ¿De qué color es? ¿En qué color pensó cada uno de nosotros? (PAUSA) Para apreciar mi magia en lo que vale hay que alertar los sentidos, atender a todas y cada una de las señales. Así de simple. (PAUSA) Contaré hasta tres. Más bien, desde tres. ¿Preparados? Tres, dos, uno. (PAUSA) ¿Lo ven? ¿Lo palpan? Acaban de dar valor al silencio. Por un instante contuvieron la respiración y el pulso se aceleró… En ese segundo maravilloso creyeron en mi magia, en la ilusión. Hubo un momento de fe y esperanza. ¿Me equivoco? (CASI SIN TRANSICIÓN) Atendiendo a las múltiples llamadas, etcétera, etcétera, repetiré a ustedes el acto mágico que me consagró allende las fronteras y que se presenta por primera vez en la república.

Aplausos grabados. DAMUS va hacia NOTICIADORA, la abraza y besa. Los dos se sientan.

NOTICIADORA
¡Fabuloso!  Sencillamente ¡fa-bu-lo-so!

DAMUS
Gracias, gracias.

NOTICIADORA
(AL PÚBLICO) Es para nosotros mucho gusto tener frente a las cámaras del sesentinueve al laureado escritor de nuestra telenovela. (PEQUEÑA PAUSA) Siempre inicias tus presentaciones personales con ese monólogo. ¿Nos puedes decir por qué?

DAMUS
Con mucho gusto. Me cabe el orgullo de haber escrito la novela medular —por decirlo así— de muchas repúblicas. Mis detractores me acusan abiertamente de interferir en la vida y milagros de los ciudadanos. De propiciar situaciones extremas. De financiar proyectos. Etcétera. Y yo sólo soy el escritor. El cronista. Por razones de seguridad personal, no puedo decir el verdadero significado de mis presentaciones con ese monólogo. Sin embargo, y para dar una ligera idea, mencionaré que otros usan fachadas tales como alianzas para el progreso, ayuda internacional a los países subdesarrollados, ejército de paz, etcétera.

NOTICIADORA
Entiendo. Y estoy segura de que nuestro público televidente también ha comprendido. (TRANS.) Me llena de curiosidad saber que has dejado tu retiro espiritual en Macchu-Picchu para venir a esta entrevista. ¿Acaso hay otra razón?

DAMUS
Sí y  no. Verás. También estoy invitado esta noche a la misa de acción de gracias por el primer aniversario de la toma del poder.

NOTICIADORA
Gloriosa fecha que coincide con el último capítulo de tu telenovela. ¿Cómo te sientes de ser el padre de la criatura?

DAMUS
Para serte franco, hay momentos en la vida de un escritor en que se pierde el control de personajes y situaciones. Este capítulo último va a demostrarlo con toda claridad.

NOTICIADORA
¿Quieres decir que, en contra de lo que habías planeado, el giro será diferente?

DAMUS
Así es. Y no puedo hacer mucho por evitarlo.

NOTICIADORA
Mayor razón para esperar ansiosos el final. Vayamos, pues, al Tercer Tiempo.

DAMUS
Sea. Lo que está escrito, escrito está.

        Transparencia:

Cementerio Metropolitano. Día. Coro lejano. El ataúd en el centro. Rodeándolo, CURA, AUTORIDAD CIVIL, AUTORIDAD MILITAR, TESTIGO, ESCRIBA, CURIOSOS.

AUTORIDAD CIVIL
Los sellos están intactos.

AUTORIDAD MILITAR
Mjú. Yo mismo los puse.

CURA
Y ahí están los siete candados. ¿Necesitáis mayor evidencia?

AUTORIDAD CIVIL
Yo como Santo Tomás…

AUTORIDAD MILITAR
Yo también.

        AUTORIDADES hacen señal a ESCRIBA. Este lee.

ESCRIBA
“Por orden de autoridad competente se efectuará la exhumación de los restos del enemigo público número uno…”

AUTORIDAD CIVIL
¡La parte que interesa!

ESCRIBA
(BUSCA. LEE) “…determinar, dos puntos. Primero, si se trata efectivamente del cuerpo de Fleder, el último, también conocido como…”

AUTORIDAD MILITAR
¡Más adelante!

ESCRIBA
(LEE) “Segundo, ante insistentes rumores, demostrar que el ataúd no está vacío ni mucho menos, y que el cuerpo…”

        ESCRIBA levanta la vista. AUTORIDADES le indican seguir.

ESCRIBA
(ENTUSIASMÁNDOSE) “Tercero, comprobados los extremos anteriores, proceder a un examen médico legal para determinar, ya sin lugar a dudas, la verdadera causa del fallecimiento de…”

AUTORIDADES le marcan alto con la mano. ESCRIBA deja la lectura, enrollando el pliego y retirándose discretamente a un segundo plano.

CURA
Dejad que los muertos descansen en paz.

AUTORIDAD CIVIL
Yo soy un instrumento. No puedo hacer nada para evitarlo.

CURA
In nomine patrii…

AUTORIDAD MILITAR
(BAJO) ¿Quién tiene la llave?

CURA
…et fillii…

AUTORIDAD CIVIL
(BAJO) Yo no.

CURA
…et spiritus sancti…

AUTORIDAD CIVIL
(A CURA) La llave.

CURA    
Os la di antes de venir.

AUTORIDAD MILITAR    
A mí no.

AUTORIDAD CIVIL
A mí tampoco.

CURA
(SONRIENDO CON PICARDÍA) Que se haga, entonces, la voluntad del Señor.

AUTORIDAD CIVIL
(APARTE) Esto me huele mal.

AUTORIDAD MILITAR
(IGUAL) ¡Apesta!

AUTORIDAD CIVIL
(A CURA) Padre, sin esa llave maestra no podemos abrir los siete candados…

AUTORIDAD MILITAR
…ni romper los sellos…

AUTORIDAD CIVIL
…ni examinar el cadáver.

CURA
Señores míos, yo no tengo la llave.

        Protestas de los concurrentes.

CURA
Así que mejor dejamos esto para otro día. O nos olvidamos de una vez por todas del asunto. Ciertas cosas es mejor que sigan como están. A veces el saber demasiado no es bueno para la salud… espiritualmente hablando, por supuesto.

        Todos, excepto AUTORIDADES, aprueban la moción.

AUTORIDAD CIVIL
Parece que usted no comprende.

AUTORIDAD MILITAR
Se trata de una orden.

CURA    
Dictada por el ser supremo. Él sabe el por qué de las cosas. Lo de la llave, por ejemplo, no es casual.

AUTORIDADES
(ENCARÁNDOLO) ¿No?

CURA
No se mueve la hoja del árbol…

AUTORIDADES se miran a punto de explotar. Hablan en secreto para ponerse de acuerdo.

AUTORIDAD CIVIL
¡Lo hacemos directamente responsable!

AUTORIDAD MILITAR
¡Tendrá que rendir cuenta a nuestros superiores! Vonós.

AUTORIDAD CIVIL
Sí. ¡Vonós!

Los dos salen rápidos, seguidos por ESCRIBA y TESTIGOS. Quedan CURA y varios CURIOSOS.

CURA
(RÍE) ¿Cómo la ve desde ahí, señor Damus?

Uno de los CURIOSOS que ha permanecido oculto, se vuelve. Es DAMUS.

DAMUS
De película, padre. De película.

        Los dos ríen divertidos.

CURIOSO UNO
¿Qué está pasando aquí?

CURIOSO DOS
No sé.

CURIOSO TRES
Yo creo que nos están pegando una buena baboseada.

CURIOSO CUATRO
Sí, pues. Mejor vonós.

TODOS
¡Vonós!

Salen. La escena desierta un momento. Uno a uno asoman PERROS, GATOS, PERIQUITAS AUSTRALIANAS y LORO. Tienen deplorable aspecto, descoloridos y flacos.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Ya no aguanto las patas.

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
De seguir así, terminaremos a gatas.

LORO
Gatas, las mujeres de los gatos que se alimentan de ratas.

GATO UNO
(AMENAZANTE) ¡Y una que otra vez de loros huecos!

LORO
(RETROCEDE) Cuidado, que soy cardiaco.

PERRO UNO
(INTERPONIÉNDOSE) Calma. Calma.

GATO UNO
El loro empezó con alusiones personales.

LORO
Animales, en este caso.

PERRO UNO
¡Shóooooooooo!

LORO    
¿Comen o no comen ratas los gatos?

        Traqueteo. Sonido de temblor.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Cállense que con tanto ruido provocaron un alud.

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
No hermana. El sonido viene del ataúd.

        Todos miran a respetable distancia el ataúd. Nuevo traqueteo.

LORO
¡Puta!

PERROS
(ATERRORIZADOS) ¡Guau!

GATOS
(ÍDEM) ¡Miau!

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Ni siquiera he confesado…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
Yo tampoco he comulgado.

LORO
Pues lo que soy yo, del miedo me he cagado.

        Entra FLEDER.

FLEDER
A un lado, ¡animalero del demonio!

Todos se apartan para dejarlo pasar. FLEDER se sienta pesadamente sobre el ataúd.

FLEDER
Puta, ¡qué cansado estoy!

Tose. Escupe. PERRO TRES se acerca a oler el esputo. FLEDER lo aleja de un puntapié.

FLEDER
¡Chucha!

PERRO TRES se aleja llorando, echándose en un rincón. FLEDER enciende un cigarro. Tose de nuevo.

FLEDER
Ha sido un largo camino. Lo recorrí, porque alguien dispuso que estaba escrito en la palma de mi mano. (ESCUPE) ¡En la palma de mi mano! Si mi madre hubiera tomado Talidomida, quizá yo habría nacido sin manos, y mi suerte sería otra. O tal vez ni hubiera nacido. (FUMA. ASPIRA PROFUNDAMENTE. HABLA SIN EXHALAR) Serás alguien realmente importante, Fleder. Serás alguien realmente excepcional, grandioso, único, ejemplar, magnífico, poderoso imán, balanza, péndulo…

Exhala. Queda sin aliento un instante. Se pone de pie y camina, sin d ejar de fumar.

FLEDER
¿Habló alguien de la soledad? ¿Mencionó alguno la fatiga, el frío, el insomnio, el miedo, el hastío…? ¿Por qué no leyeron también en la línea de la vida?

        Se detiene. Mira a su alrededor. Observa a sus animales.

FLEDER
Estaba la mosca en la pared, pues ahí que se esté, pues ahí que se esté. (TRANS.) Lo que hice, lo hice por mi voluntad. (TRANS.) Vino la araña a comerse a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté…

Poco a poco empezará a jugar con sus animales. Estos, temerosos al principio.

FLEDER
En el fondo, creo que volvería a vivir esta vida. (TRANS.) Vino la rata a comerse a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté. (TRANS.) No dejó de tener sus momentos emocionantes, apasionantes, divertidos. (TRANS.) Vino la gata a comerse a la rata, la rata a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté…

        FLEDER y sus animales entran en un juego eufórico.

FLEDER
Recuerdo las correrías por los bajos fondos de París. (TRANS.) Vino una pera a comerse a la gata, la gata a la rata, la rata a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté. (TRANS.) Escucho el sonido de las olas en las soleadas playas mediterráneas. (TRANS.) Vino una leona a comerse a la perra, la perra a la gata, la gata a la rata, la rata a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté. (TRANS.) Aspiro el aroma de exóticos perfumes en Hong Kong y Pekín y Tokio. (TRANS.) Vino una tigra a comerse a la leona, la leona a la perra, la perra a la gata, la gata a la rata, la rata a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté. (TRANS.) Estrecho las manos de un pueblo en el Campo de Marte (TRANS.) Vino una osa a comerse a la tigra, la tigra a la leona, la leona a la perra, la perra a la gata, la gata a la rata, la rata a la araña, la araña a la mosca, y la mosca en la pared; pues ahí que se esté, pues ahí que se esté…

        Euforia total, con conato de pleito entre animales. Todos excitadísimos.

FLEDER
(EN UN ALARIDO) ¡Mamáaaaaaaaa!

Cae al suelo. Queda inmóvil. Animales lo rodean curiosos, olfateándolo. Finalmente, se sientan pensativos.

PERRO UNO    
¿Qué pasó?

GATO UNO
¡A saber, vos!

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Le agarró dura la patada…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…y ya no quiere hacer nada.

        Pausa larga. Nadie se mueve.

PERRO DOS
Yo creo que estiró la pata.

GATO TRES
Muerto…

TODOS
(COMO EN ECO) Muerto, muerto, muerto, muerto…. (ETC.)

        Pausa larga. LORO se acerca a hacerle un cuidadoso examen.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
No se trata de una examinación a la ligera…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…lo que pretende es hueviarle la cartera.

LORO
(IGNORÁNDOLAS OLÍMPICAMENTE) Sin lugar a dudas, este entregó el equipo.

        Pausa silenciosa. Se miran inquietos.

GATO SIETE
¿Y ahora…?

GATO CATORCE
¿Qué hacemos ahora?

PERRO TRES
¿Quién nos sacará a dar la vuelta?

GATO CATORCE
¿Quién cuidará de nosotros?

PERRO UNO
¿Quién nos dará de comer?

La palabra comer queda flotando pesadamente en el ambiente. Todos se miran, miran el cuerpo, se miran de nuevo.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Y, a propósito, hermana, ¿cómo sabrá la carne humana?

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
Qué pregunta, hermana; sabes bien que soy vegetariana.

        LORO da unos pasos pensativamente.

LORO
Yo me voy a dormir, pues tengo sueño, / pero déjenme darles un consejo. / Como dice un dicho muy añejo, / culo fondeado carece de dueño.

        LORO sale rápido. Todos se miran. PERIQUITAS se persignan.

UNA PERIQUITA AUSTRALIANA
Gracias te damos, Señor, por ser plumíferos…

OTRA PERIQUITA AUSTRALIANA
…porque el mundo está podrido de mamíferos.

PERIQUITAS salen rápidas. Pausa tensa, pesada. PERROS y GATOS se acercan al inmóvil cuerpo. Olfateando. Mordisqueando. Finalmente, un festín. Entre gruñidos vemos como descuartizan a FLEDER. PERROS y GATOS salen en todas direcciones, con pedazos de miembros desgarrados entre sus fauces. Sólo queda la cabeza de FLEDER en el centro de la escena. Pausa. Entra DAMUS. Toma cuidadosamente la cabeza, observándola pensativo.

DAMUS
¿Será o no será? ¡Qué preguntita!

Se pone la cabeza de FLDER bajo el brazo e inicia mutis. En dirección contraria vienen CURA, AUTORIDAD CIVIL, AUTORIDAD MILITAR, ESCRIBA, TESTIGOS, CURIOSOS. DAMUS los saluda con un ligero movimiento de cabeza y sale.

AUTORIDAD CIVIL
¿Quién es ese?

CURA
El guardián del cementerio. No hay cuidado.

AUTORIDAD MIILITAR
¿Qué lleva bajo el brazo?

CURA
La calavera de un infeliz enterrado como N. N. (CONFIDENTE) Su hijo desapareció una noche. Buen muchacho, estudiante. Dicen que lo capturó la policía secreta, pero… En fin, del muchacho nunca se volvió a saber nada. (SEÑALA SU SIEN CON EL ÍNDICE) Desde entonces, perdió contacto con la realidad.

AUTORIDAD CIVIL
Mmmmmmmmmmmmmmmm.

AUTORIDAD MILITAR
Mmmmmmm-Mmmmm-Mmmmm.

CURA
Es totalmente inofensivo. No se preocupen.

AUTORIDAD CIVIL.
Ya no me preocupo. Recelo, únicamente.

AUTORIDAD MILITAR
También yo. Nunca se sabe.

        Hacen señal a ESCRIBA. Este se adelanta y lee.

ESCRIBA
“Habiendo superado el contratiempo de la llave maestra, se procederá a la apertura de los siete candados…”

        Se detiene a una señal de AUTORIDADES.

AUTORIDAD CIVIL
(ENTREGANDO LA LLAVE) Hágame el honor, comandante.

AUTORIDAD MILITAR
(RECHAZÁNDOLA SUAVEMENTE) Usted, por favor, licenciado.

CURA
(TOMANDO LA LLAVE) Lo que la iglesia hace, solo ella lo deshace.

        Abre los candados. AUTORIDADES y la consabida señal a ESCRIBA.

ESCRIBA
(LEE) “El comandante general procederá, sin más trámite, a romper los sellos…”

AUTORIDAD MILITAR
En nombre de las fuerzas armadas, ha sido ejecutado.

        TESTIGOS y CURIOSOS no se pierden detalle.

ESCRIBA
(EMOCIONADO) “La autoridad civil, después de esto… (MIRA TÍMIDAMENTE. AUTORIDADES APRUEBAN. ESCRIBA CON MÁS CONFIANZA) …después de esto, levantará la tapa del ataúd…”

AUTORIDAD CIVIL levanta tapa. Todos se quedan petrificados, excepto ESCRIBA, quien sigue leyendo emocionado.

ESCRIBA
“…y certificará que el cuerpo del enemigo público número uno, también conocido como Fleder, el último, se encuentra en el mismo lugar donde fuera colocado hace un año. Después de eso, se trasladarán los restos al anfiteatro anatómico para el examen médico legal. El forense, ya sin lugar a dudas, reafirmará lo dicho sobre su muerte.” (PAUSA. TOMA AIRE) “El gobierno quiere con esto poner fin a murmuraciones, demostrando una vez más que, con la ejecución de los culpables se puso punto final a este caso mundialmente conocido como el parricidio del siglo…”

AUTORIDAD CIVIL
No es posible…

AUTORIDAD MILITAR    
Debe tratarse de un error…

CURA
(CAE DE RODILLAS Y CON LOS BRAZOS EN CRUZ) ¡Milagro!

ESCRIBA
(SIN ENTERARSE) “Finalmente, se devolverán los restos mortales a su última morada, sellando nuevamente el…”

Los murmullos de los concurrentes han subido de volumen. ESCRIBA deja de leer y se acerca a mirar también. Se asusta y tira el pliego al carajo.

ESCRIBA
¡Puta!

AUTORIDADES conferencian en secreto, con marcada mímica. Después de un momento, cierran de golpe la tapa del ataúd prensándole la mano a CURA. Todos se callan con el golpe.

CURA
(EN UN ALARIDO) ¡Me jodieron la de pedir limosna, hijos de la Santísima Trinidad!

CURA bailotea del dolor, agitando la mano y quejándose. AUTORIDADES colocan nuevos sellos y cierran candados. Se yerguen lentos. Miran con gravedad a los presentes.

AUTORIDAD CIVIL
Aquí no ha pasado nada.

CURA
¿No? Me dejaron impedido, ¡hijos de Satanás!

AUTORIDAD MILITAR
Declararemos lo que conviene declarar. Si alguien dice lo impropio, será considerado traidor a la causa… y deberá atenerse a las consecuencias.

AUTORIDAD CIVIL
Firmemos el acta, y cada quien a su casita como si nada.

CURA
¿Firmar? ¿Y con qué mano voy a firmar, hijos de la mañana?

AUTORIDAD CIVIL
No se preocupe, padre. Su palabra nos basta.

AUTORIDAD MILITAR
Siempre y cuando sea la palabra que nos gustaría escuchar. Vonós.

AUTORIDAD CIVIL
Sí. Vonós.

        Todos salen. Queda únicamente el CURA, sufriendo todavía por el dolor.

CURA
¿Cómo la ve desde ahí, señor Damus?

DAMUS
(DESDE LA PLATEA) De película, padre. De película.

        Transparencia:

FIN.

CAE LA LUZ.

INTERMEDIO





FRACCIÓN:

NOTICIADOR
Última hora. Acabamos de recibir el dictamen del médico forense y dice así en la parte que nos interesa: “El enemigo público número uno falleció a la edad de treinta y tres años, de cáncer en el pulmón…” (PEQUEÑA PAUSA) Cabe agregar un mensaje de interés general: “Cuidado. La asociación de médicos cirujanos ha determinado que fumar es peligroso para la salud.” (TRANS.) Yo dejé el vicio. ¿Y usted?

        CAE LA LUZ

FIN