Un acto
© 2004: Manuel Corleto

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Un acto
Manuel Corleto

PERSONAJES:
ÉL y ELLA

Es la sala comedor de modesto apartamento. Puerta de calle y otra a interiores. Televisión, radiotocadiscos, refrigerador, no faltan. ELLA ve su programa favorito cuando la puerta se abre y entra ÉL. Viene empapado hasta los huesos. Ella lo mira seriamente.

ELLA
¿Llegaste?

ÉL no contesta. Se concreta a tirar la gabardina sobre un sillón. ELLA sigue mirando su programa de TV.

ELLA
Tuve un día magnífico, lleno de sol, todo me salió de maravilla; ¿vamos a cenar fuera esta noche?, ¿o a bailar o al cine?

ÉL desaparece en interiores.

ELLA
(GRITANDO) ¡¿O vas a llevarla a ella?!

Pausa. Sigue viendo TV. ÉL aparece después de un momento, abre el refrigerador y saca una cerveza.

ÉL
¿Dónde diablos está el destapador?

ELLA
Sí, querido, es emocionante. Imagínate que hace un momento él llegó de la calle con una gran sonrisa en los labios y le dio un beso en la mejilla a su esposa. Pero lo que ella ignora, es que el marido se ha visto antes con la amante, pretextando que debía trabajar hasta tarde.

ÉL va a responder una barbaridad, pero se contiene. Busca en las gabetas y encuentra el destapador. Lo usa y bebe la cerveza con avidez.

ELLA
¿Qué me decías, cariño? Ah, sí, que quieres el destapador.

ÉL se dirige al televisor y, sin más, cambia de canal.

ELLA
No me importa. He visto el programa cientos de veces. Casi todas las noches. Ya debería haber un cambio, ¿no te parece?

ÉL
¿Qué te pasa?

ELLA
¿A mí? Nada.

ÉL
¿Por qué no hablas con claridad? Protestas todo el tiempo.

ELLA
Será porque me casé queriéndote... o porque no te quería... o porque voy a tener un hijo.

ÉL la mira. Pausa.

ÉL
Veré el box.

ELLA
Si es niña la llamaremos Constancia. Si es varón le pondremos... ¿cómo se llamaba tu padre?

ÉL
¡Deja a mi familia en paz!

ELLA
Espera... Ya recuerdo... Prudencio.

ÉL toma la gabardina y se dirige a la puerta rápidamente.

ELLA
¡Tengo ganas de comer fresas con crema!

ÉL se detiene sin volverse.

ELLA
Las abuelitas dicen que a una mujer en estado deben cumplírsele todos sus deseos. ¿Te gustaría que tu hijo naciera con una berruga en la nariz y el labio leporino?

ÉL gira y la enfrenta.

ÉL
¡Te he dicho que no juegues con eso!

ELLA
¡Quiero fresas con crema!

ÉL
Búscalas tú misma y no me jorobes más la paciencia!

ELLA ríe en su cara, mostrándole retadoramente la mejilla.

ELLA
¿Derecha o izquierda? ¿Vas a pegarme?

ÉL levanta la mano para descargar el golpe. Se contiene a duras penas y gira para salir.

ELLA
¡Y no golpees la puerta al salir!

ÉL sale, cerrando con fuerza. Pausa. ELLA va a llorar. No puede. Da unos pasos desesperadamente y apaga el televisor.

ELLA
¡Y no vuelvas!

Pausa. Cambia totalmente de actitud, sin transición, dirigiéndose al público en un tono bastante impersonal.

ELLA
...y así ha sido casi todas las noches. De madrugada vuelve borracho y la despierta para contarle alguna tontería que le ocurrió en la cantina, y otras mentiras para suavizar la situación. Y ella termina en sus brazos, ahogada por su peso y el aliento alcohólico...

Durante el parlamento anterior, ELLA desaparecerá un instante en interiores, sin dejar de hablar, y sale con una bata puesta. Se detiene con las manos en la cintura.

ELLA
...veamos lo que ocurre esta vez. Ella enciende el televisor (LO HACE) ...y termina por quedarse dormida en el incómodo sillón con forros de plástico.

Se sienta y cierra los ojos. Pausa. Escuchamos el sonido de llaves y la puerta que se abre. Entra ÉL, borracho a morir.

ÉL
¡Shhhhhhh...! La reina de la casa duerme y el fiel lacayo velará su sueño...

Se acerca, tratando de no hacer ruido, pero tropieza y arma escándalo. ELLA abre los ojos asustada.

ÉL
¡Shhhhhhhh....!

ELLA
Me quedé dormida.

ÉL
Parecías un ángel.

ELLA
Me voy a la cama.

ÉL
Espera... hay cosas en la vida que...

ELLA
Saca las sábanas y colchas. Dormirás en el sofá. Buenas noches.

ÉL
Pero...

ELLA gira y sale, cerrando la puerta. ÉL camina con intenciones de derribarla, si es preciso.

ÉL
No voy a...

Tropieza, cae. Queda en el suelo.

ÉL
¡Me lleva la...!

Repara en el televisor.

ÉL
¡Y gastándose la energía eléctrica por gusto!

Se pone de pie y antes de llegar al aparato, se dirige al público, sin transición.

ÉL
...Bueno, es cosa de casi todas las noches. Ella terminará por dolerse del marido, abrirá la puerta despacito y lo llamará al dormitorio... Ocurre siempre. (PEQUEÑA PAUSA) Imposibilitado de dar un paso más, se desplomará sobre el sofá.

Con movimientos lentos, naturales, se coloca boca abajo en el sofá.

ÉL
...pero esa noche no ocurrió. La puerta permaneció cerrada y con doble llave. A la mañana siguiente...

ÉL ronca. ELLA abre la puerta. Viene vestida para salir y con una maleta. Apaga el televisor y se dirige a la puerta. Gira sobre sus talones y lo mira. Habla en forma impersonal.

ELLA
Algunos dicen que pudieron ser felices. Se necesita tan poca cosa y tanto. Un rincón, un hombro donde recostar la cansada cabeza, paz...

Deja la maleta en el suelo.

ELLA
Cariño... Hace un día hermoso allá afuera. Vayamos a la playa, al bosque, a la montaña. “Fido” necesita correr un poco, estirar las patas, respirar el aire puro... Ya ves qué feliz es persiguiendo conejos y ardillas, escarbando la tierra húmeda, dejándose llevar por la corriente, soñando a la sombra de un árbol, entre los arbustos.

Lo besa en el cuello. ÉL protesta.

ELLA
Despierta.

ÉL abre los ojos.

ELLA
Levántate.

ÉL se sienta.

ELLA
Hace un siglo que no vamos al mar.

ÉL
Tengo qué hacer.

ELLA
Déjalo.

ÉL
Los amigos...

ELLA
Tu esposa.

ÉL
El poker...

ELLA
Tiene las patas entumecidas. ¿No vas a llevarlo a dar una vuelta?

ÉL
Tengo qué hacer... los amigos... el poker...

ELLA
Déjalos... tu esposa... el perro...

EL se pone de pie violentamente y se arregla el nudo de la corbata.

ÉL
Ya te dije que tengo un compromiso. Anoche perdí doscientos. Hoy ganaré cuatrocientos. Así ocurre.

ELLA
Como quieras. Pero me gustaría...

Hay una pausa. Se miran. ELLA  toma su maleta y va hacia la puerta. Habla al público.

ELLA
Y esa vez, como tantas otras, el silencio formó una barrera entre los dos.

México, 1972